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Etimológicamente “ortomolecular” del griego ortho: correcto o justo + molecular, se traduce en un entorno molecular correcto para el óptimo funcionamiento físico y psíquico. La Nutrición Ortomolecular es una terapia natural, individualizada y holística, es decir, tiene en consideración a la persona en su totalidad.
Consiste en optimizar la salud mediante la corrección de la dieta y el aporte de nutrientes de origen natural o suplementos nutricionales (vitaminas, minerales, ácidos grasos, aminoácidos, probióticos, enzimas, fitonutrientes, oligoelementos…), en las cantidades adecuadas, según las causas que originan la dolencia o los desequilibrios internos.
Para determinar cuáles son los nutrientes que la persona necesita se hace una amplia entrevista. Es imprescindible conocer el estilo de vida, su actividad diaria, su nivel de estrés, la historia clínica personal y familiar, etc. Además se rellena un cuestionario absolutamente confidencial, a fin de poder confeccionar un programa nutricional específico.
Puede creerse que no es necesario dar nutrientes al organismo ‘si se come de todo’ y es frecuente escuchar que con una dieta variada es suficiente.
Sin embargo, de diversos estudios y encuestas realizados en Estados Unidos y Europa se desprende que, aunque la población está sobrealimentada, un 80% sufre deficiencias y carencias en los principales nutrientes y, con el tiempo, esto puede causar desequilibrios más o menos graves.
A la reducción de nutrientes contribuyen, además, el empobrecimiento de la tierra debido a la explotación en la agricultura (fertilizantes químicos, pesticidas, bactericidas, antifúngicos…), y la ganadería intensivas (vacunas, antibióticos, hacinamiento, piensos transgénicos…). A esto se añaden la industrialización, el refinado, el almacenamiento y el transporte de los alimentos; el uso de aditivos, conservantes, colorantes e irradiaciones, y el excesivo consumo de conservas, enlatados y precocinados. Sin olvidar la deficiente preparación de las comidas: frituras, temperaturas elevadas, combinaciones inadecuadas… y que cada vez se comen menos frutas y verduras frescas. También hay que tener en cuenta los problemas digestivos (pueden causar disminución de la absorción intestinal, alteración de la microbiota…) y la autointoxicación por el estrés, los medicamentos y el deficiente funcionamiento de los filtros orgánicos, además de las comidas fuera de casa…
En fin, si cada célula de nuestro organismo recibe, a nivel bioquímico, los nutrientes apropiados para su funcionamiento biológico en un medio interno limpio, el organismo regulará adecuadamente las hormonas, anticuerpos, prostaglandinas y numerosas sustancias que favorecerán la mejora del sistema inmune, un buen estado emocional y el mantenimiento óptimo de la salud y el bienestar.
Posibilidades de la Nutrición OrtomolecularLa terapia puede estar indicada para los siguientes desequilibrios: